¿Es posible que un sentimiento al que estás acostumbrado se convierta en un buen amigo? Entonces Sekai No Owari no se equivoca al plantearlo de esta manera. Mr. Heartache es todo lo que quizás no te imaginarías bajo el el significado de un buen amigo, sin embargo conocerlo ahora probablemente te traiga una sonrisa.
Entre los murmullos de una ciudad lejana y luces que brillan entre la oscuridad, cierras los ojos y tratas de no pensar en nada. La ansiedad se resiste a dejarte en paz y de nuevo en el pecho se te acumula la tensión que estás viviendo. Es medianoche y las visitas no están planeadas. O al menos eso pensaste.
Lejos de un caballero con acomodada corbata, Mr. Heartache irrumpe en tu soledad con un ramo de flores igual al que dejaste tirado cuando te rompieron el corazón. La ironía en dos piernas velludas con sandalias. A pesar de ropa que está fuera de lo estético y alarmante cabello rosa, no tienes energía para echarlo a patadas. Lo ignoras lo más que puedes hasta que lo ves sentarse a tu lado, entonces sabes que no se irá pronto.
¿Cuántas veces lo has visto hasta ahora? Ni idea, sólo sabes que ha pasado el tiempo porque está más gordo y viejo que antes. Él viene a verte únicamente cuando tu ánimo se encuentra por los suelos. Es el amigo que pacientemente intenta levantarte de la tristeza que te hace dormir. El comportamiento de un niño infantil te despierta más a fuerzas que por gusto.
Con aquella sonrisa que te molesta porque tu humor no puede con ella, sabes que él estará el tiempo que tu decidas. Lo dejas que haga lo que quiera mientras te sirves una, dos, tres, cuatro copas hasta que se acaba la botella. Bailan como María Antonieta y sin darte cuenta terminan brindando por los buenos días. El cansancio te vence y antes de salir Mr. Heartache te echa una cobija encima.
(X)
Paulina Herrera
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