El quinto mes del año inicia
acompañado de malas noticias para nuestro país; la ley anticorrupción es
despreciada por nuestros legisladores, los expertos independientes abandonan
México y Ted Cruz termina su carrera presidencial. Tantas cosas terminan
afectando a los mexicanos, que cansados y hartos, buscan lugares donde
relajarse. En nuestra ciudad las cosas no son distintas, pero afortunadamente
contamos con sitios donde desahogarnos. En esta ocasión mi columna se dedicara
a hablar del concepto, servicio y peculiaridades de un sitio donde la felicidad
llega entre cervezas.
A quince minutos del Parque
del Cimatario, en un pequeño poblado llamado El Durazno se encuentra The
Charly´s Bar. Este lugar es un bar sencillo de pueblo y su aspecto lo demuestra.
Al fondo esta la barra de madera, detrás se exhiben las botellas, al lado una
rockola y del otro refrigeradores repletos de cerveza. Las mesas, cuadradas de
la marca Corona, están muy bien distribuidas y con una baraja encima; el cuarto
contiguo tiene dos mesas de billar y cuatro bancas esquineras. Gracias a esto
se puede beber y jugar al mismo tiempo.
Los dueños del sitio se
preocupan por sus clientes, en su mayoría ingenieros, así que el alcohol y la
botana nunca faltan. En la parte de las bebidas, lo más vendido y requerido son
las cervezas familiares, aunque también hay micheladas y tragos simples. En la
comida no hay nada que hacer; pero en cada ronda un plato de fritura, cueritos
y pico de gallo es rellenado. Además hay mostradores como en tienda de
abarrotes y se pueden comprar golosinas. Lo único que el cliente hace es llamar
al mesero y pedir lo que prefiera.
Los trabajadores del Charly´s
son muy atentos y serviciales, a pesar de que son solo dos. Cuando los cascos
de cerveza o los platos de botana se vacían, inmediatamente llega un mesero y
ofrece más producto. Aunque el bar siempre está lleno, ellos intentan
personalizar el servicio y mostrar interés. Estas atenciones hacen que los
clientes se sientan en confianza.
En un ambiente de
familiaridad, como el que ofrece The Charly´s Bar, cualquiera puede ser feliz.
Y lo mejor es que abren todos los días y desde muy temprano. Así que esta es
una muy buena opción para beber y divertirse en cualquier momento, dejando en
el olvido la desastrosa situación en la que nuestro país está envuelto.
Daniel G. Téllez
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