Con
un clima helado y un viento aterrador, la clase política del país comienza su
camino a la presidencia, causando más terror que las propuestas en la campaña
de Trump. Nuestra ciudad, callada y ausente, espera el término de la huelga en
su máxima casa de estudios. Después de noticias tan desagradables, las personas
necesitan un lugar en donde divertirse. El lugar del que hablare esta semana es
perfecto para beber cerveza, mientras juegas y te diviertes.
En
una pequeña plaza comercial, en Bulevar de la Nación #120 y esquina Pie de la
Cuesta, se encuentra El Billarucho. Este billar es un lugar pequeño, con una
decoración muy sencilla y poco personal. Ya que se encuentra en el segundo
nivel, todas las mesas tienen una excelente vista, especialmente las de afuera.
Quizá
el único escollo que uno encontraría, seria al iniciar la noche y checar la
carta. No hay variedad. El dueño parece estar casado con una cervecera, hasta
los póster del baño son de “te hace falta ver más box”. En la parte de las
botanas las cosas no son distintas. Y aunque esto parece malo, la clientela no
pierde tiempo. “Buenas noches, una cubeta y unas papas, mesa…3”.
La
tensión desaparece y carcajadas brotan, cuando entre bolas, veloces choques aparecen. Jugar billar es muy divertido y acerca a las personas, así que hay
que hacerlo con quien estimemos. El Billarucho, además de accesible y barato,
es perfecto para divertirte con pocas personas.
Daniel G. Téllez
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