Explosiones petroleras,
manifestaciones politécnicas y reformas educativas; acompañan a los últimos
días de abril, depositando mortificación en buena parte de la sociedad
mexicana. En las calles de nuestra ciudad el malestar no es indiferente, las
fallas de los poderes ejecutivos locales enfurecen y entristecen. El pensar en
estas cuestiones estresan a los habitantes, quienes cansados buscan un lugar
donde divertirse y olvidar por unas horas el panorama nacional. Esta ocasión, mi
columna se dedica a hablar de un lugar donde la felicidad nace entre tarros de
cerveza, pizzas y pantallas gigantes.
A unas cuantas cuadras del
famoso Templo de la cruz y otras tantas de los majestuosos Arcos, se encuentra
The College Fun Faculty. Este lugar es un bar deportivo universitario. En sus
tres pisos las mesas estas distribuidas de manera que cada una este orientada a
una televisión. Las paredes, aparte de las ya mencionas pantallas, están
decoradas con banderines universitarios, brindando gran fuerza al concepto
Cientos de personas llegan a
saciar su sed y degustar buena comida. Del lado de las bebidas, se puede
encontrar las mismas que en cualquier barra se servirían, pero lo que llama la
atención es un balde de 5 litros de cerveza muy bueno y económico. En la comida
hay una gran variedad y excelente sazón; especialmente en las pizzas, hamburguesas
y conos de papas fritas. Los clientes salen con el estomago lleno y las
gargantas hidratadas. Panza llena, corazón contento.
College es un bar preocupado
por su clientela y el esfuerzo se nota. En sus redes sociales lanzan distintas
promociones interactivas, muy benéficas para los consumidores. Los distintos
niveles están repletos de meseros, muy atentos y serviciales. A pesar de que el
lugar este lleno, especialmente cuando hay fútbol, el servicio es muy puntual y
personalizado sobre todo si eres cliente constante.
En un ambiente desolador,
siempre se agradecerá la existencia de lugares que brinden un respiro a la
comunidad. College es una de las mejores opciones para divertirse, comer y
beber; en toda la ciudad. Con precios módicos y atención al cliente, este sitio
garantiza un momento de goce. Y a pesar de que nuestro país, ridículamente, se
cae a pedazos tenemos que continuar y buscar la felicidad en cualquier sitio.
Daniel G. Téllez
Daniel G. Téllez
No hay comentarios:
Publicar un comentario