Los mexicanos somos el resultado
de la mezcla de distintas culturas, somos herederos de una larga lista de
costumbres y tradiciones, que con el tiempo se han ido transformando, hasta
llegar a lo que hoy conocemos. Un ejemplo de ello son las posadas.
Las posadas son un conjunto de
celebraciones, que se realizan durante los nueve días antes de navidad, con el
fin de recordar el trayecto que recorren María y José, antes de llegar al Belén; estás “fiestas” se originaron en América
Latina con un fin evangelizador, enseñándoles a los indígenas la religión,
mediante cantos y “obsequios”.
Actualmente en México se siguen
celebrando las posadas, quizá ya no con la misma finalidad y disciplina que
antes, pero aún se conservan ciertas tradiciones como:
·
Las letanías, que son cantos religiosos
dialogados, con el fin de hacer remembranza de hechos religiosos, con gran
importancia.
·
También está la tradicional piñata, que con
anterioridad representaba a los siete pecado capitales, cada piñata contenía 7
picos, cada uno representación de cada pecado. Al romperlas se hacía alusión
del vencimiento del hombre sobre los pecados. Hoy en día podemos ver todo tipo
de piñatas en las posadas.
·
Las famosas pastorelas, que eran
representaciones con fin lúdico para los pueblos, pues se les contaba la
historia de Jesucristo. Actualmente se siguen haciendo estás representaciones
con todo tipo de variaciones en la historia.
Las posadas
son una de la tradiciones que nos caracterizan al pueblo mexicano, a pesar de que en su conjunto
son costumbres traídas o inventadas por extranjeros. Sin embargo son
celebraciones que nos unen y nos dejan un sello.
Viridiana Caballero García
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