Arañas
hay de todo tipo y tamaños, se pueden encontrar en muchos ambientes, ya sea el
desierto caluroso, las ramas del más alto árbol o los húmedos ríos y lagos,
siempre esperando por una presa que se le presente de la manera adecuada para
que cualquier arácnido lo tome como su presa y próximo festín; pues con
colmillos afilados, una pegajosa red y mejores pasos que la mejor bailarina de valet,
siempre están listas para cazar o defenderse de algún posible depredador.
Muchos
de nosotros tenemos miedo o repulsión a estos seres con patas de aguja, pues
sus extraños movimientos además de su particular apariencia que nos hace estremecer, aun
cuando realmente los arácnidos son una preciosa obra de arte realizada por la
naturaleza, pues debajo de esa “terrorífica” apariencia se encuentra a un ser
frágil, que con refinados movimientos puede trazar en una esquina dentro del
hogar una magnífica red de seda fina milti-propósitos, la cual podemos destruir
en un segundo sin reflexionar antes acerca de todo el esfuerzo que arruinamos
con una agitada a nuestra escoba.
A pesar
del temor de algunos y la repulsión de otros, varios han logrado tomar a las
arañas como una inspiración para hacer su arte, pues ellos han logrado captar
la esencia de la araña y han tomado inspiración de ella; inspiración que
conduce a magníficos resultados en distintos campos del arte, así logrando asombrarnos
con bellísimas esculturas, preciosas pinturas, escritos excelsos y demás obras
encantadoras con arañas de protagonistas.
No
podemos negar que a pesar del miedo o repulsión que nos irradie una araña,
estás son seres magníficos, creadores de arte, danzantes de las estrellas
pegajosas que crean al tejer una trampa para los insectos, que, para ellas son
sabrosos y para nosotros una mera molestia; y no está demás tratar de reflexionar
una vez más, en nuestra posición como seres “superiores” enfrente de estos artistas
de ocho patas, hacernos las preguntas ¿Realmente debo de destruir a cada una que
me encuentre en el camino?, ese miedo ¿no será más un prejuicio que una razón
para acabar con su vida?, si todas estuviesen muertas ¿la vida sería mejor?
Sea
como sea justo ahora no se trata de dar un regaño a las personas que teman o
repudien a las arañas, si no mostrar brevemente la cara de la otra moneda, ver
lo hermoso en aquello que es estruendoso, para así tratar de buscar una nueva
fuente de inspiración de ocho patas; agradecer también que existen justo ahora,
y no tomando en cuenta el catástrofe mundial que causaría su ausencia, para así
poder mirar todo el arte hermoso que ha tomado inspiración de estos pequeños,
pero magníficos seres.
Todo suyo, Aldo Arteaga Estrada
No hay comentarios:
Publicar un comentario